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621 María Sampognaro Goldaracena

Había una vez. Otra vez: Había una vez.. Eh, este, ya está, ahora si. Ahí va: Había una vez

Maga Uruguaya actualizó la descripción.

Es un grupo abierto, en el que todos pueden participar escribiendo sus propios cuentimios, con la consigna de que en lo posible comiencen con "Había una vez" y, también en lo posible, sean cortos.
Se trata de crear, jugar, generar textos que nos hagan sentir bien, sin deternernos en la calidad literaria de los mismos, no estamos formando escritores ni poetas sino que simplemente estamos incentivando la capacidad creativa, más allá del resultado.
NO es un grupo literario, no vamos a corregir ortografía, sintaxis ni a trabajar los textos, no estamos en ese tipo de grupo.
Tampoco haremos comentarios negativos que involucren otros integrantes. Si tenemos algún malentendido o problema personal, sugerimos comunicarse vía inbox.
Eleuterio Amoedo

Había una vez una idea muy fea y muy estúpida que tuvo la inmensa suerte de nacer en tiempos feos y estúpidos. Por esto, cuando apenas daba sus primeros pasos ya se veía que su vida sería un gran éxito. Fue bautizada bajo el nombre de Corrección Política pero ella siempre prefiere ser llamada o citada por sus iniciales, CP, porque, por supuesto, las hegemonías ya no necesitan tanto protocolo.

Rosario Beisso

Había una vez una noche de viernes que prometía un sábado
y un domingo para descansar. Buen fin de semana!

Irene Vesna

Había una vez una cumbre tan alta, que tenía vértigo de sí misma.

Irene Vesna

Había una vez un hombre imposible que soñaba con una chica lista. Pobre sueño, pobre hombre, imposible despertar. Listo el cuento.

Charbelí Ramos Chávez

Cuando extrajeron la muela, la siguió el juicio: No concebía su vida sin ella.

Maga Uruguaya

Oigan, ¿qué tal si intentamos volver a escribir cortito como lo planteamos inicialmente? Si tienen ganas de despacharse no hay problema, pero percibo una tendencia al alargue general y creo que tratar de contar con pocas palabras es un buen desafío. ¡Saludos a todos!

Irene Vesna

Había una vez un taxi en un semáforo en rojo junto al cementerio. Tic tac tic tac. El muro negro y los árboles negros agazapados, la plaza inmóvil de niños ausentes, un hombre arropado con una bolsa de basura, el puesto vacante de flores. La luz verde en la curva trajo el oleaje de un mar apenas cierto, como la vida.

Omar Gil Álvarez

Había una vez un rey déspota que poseía todas las riquezas del reino. Ahora hay una república, poder judicial independiente y un puñado de familias dueñas de las riquezas.